Keith Richards, 10 cosas que hay que saber
El 18 de diciembre de 1943 nace en el Livingston Hospital, en Dartford , Kent, Inglaterra. Keith Richards, «Mr. Human Riff».
Keith Richards es cofundador, guitarrista, vocalista secundario y co-compositor principal de la banda de Los Rolling Stones.
La revista Rolling Stone lo destacó como el creador de «el mejor cúmulo de riffs individuales del rock» en guitarra, y lo clasificó como el número 4 en su lista de los 100 mejores guitarristas en 2011.
Alocado, impetuoso, bebedor, fumador y consumidor en su tiempo de diversas drogas, Richards ha establecido la imagen del rocker clásico desde los años 60. Por eso traemos hasta aquí
10 hechos sobresalientes en su vida
Un Rolling Stone de pura cepa.
La muerte de su tercer hijo, una sombra en su vida
Su tercer hijo, llamado Tara Jo Jo Gunne en honor a la amiga de Richards y Anita Pallenberg, Tara Browne, murió a la edad dos meses, de síndrome de muerte súbita el 6 de junio de 1976.
Richards estaba de gira en ese momento, algo que dijo que lo ha perseguido desde entonces.
Fue criticado en ese momento por actuar esa misma noche tras enterarse de su muerte, luego señalaría que esa fue la única forma en que pudo enfrentarlo.
Richards casi provoca la muerte de su primer hijo
En 1976, tras regresar de una actuación en Knebworth, Inglaterra, Richards conducía con su hijo de siete años, Marlon, llamado así por el actor Marlon Brando.
El pequeño Marlon estaba en el asiento trasero, cuando Richards se quedó dormido detrás del volante y el auto se detuvo abruptamente al chocar contra un árbol.
Afortunadamente, ninguno de ellos resultó gravemente herido, aunque Richards fue arrestado cuando se descubrió que portaba LSD.
Keith Richards casi muere en la Segunda Guerra
Durante la Segunda Guerra Mundial, cuando Richards era un bebé y su padre estaba peleando, su madre tuvo que salir repentinamente de su casa durante un bombardeo.
Él y su madre apenas escaparon a tiempo antes de que su casa fuera demolida durante el ataque.
La cuna de Richards, donde habría estado de no salir, fue completamente destruida.
¡Era rudo desde chiquillo!
Richards formó parte de los Boy Scouts durante dos años en su infancia.
Lo que terminó con esta etapa de su vida fue que pasó de contrabando una botella de whisky y se involucró en una pelea a puñetazos con sus compañeros exploradores.
En realidad lo único que le atraía de los Scouts era poder portar un cuchillo, pero se decepcionó cuando supo que había que ganar algunas insignias antes de poder hacerlo.
Keith Richards ama la lectura y la poesía
En 1969, tras la partida de Brian Jones, Los Rolling Stones ofrecieron su famoso concierto gratuito en Hyde Park, Londres.
En honor del guitarrista, Richards no solo soltó 3,500 mariposas sino también leyó poesía personal a la multitud.
De hecho se sabe que posee una extensa biblioteca, y en 2010 reveló que anhelaba ser bibliotecario.
Keith Richards recibió un puñetazo de Chuck Berry
A pesar de considerar como héroe a Chuck Berry e interpretar varias versiones de su música, Richards recibió un golpe de su ídolo.
Después de que terminó un espectáculo en el que ambos habían actuado, Berry descubrió a Richards rasgueando su guitarra personal.
Enfurecido por el descaro de Richards, Berry lo golpeó cara mientras gritaba «¡Nadie toca mi guitarra!».
Richards intervino en uno de los momentos más gloriosos de la música rock
En 1967, Richards y Jagger asombraron a los fanáticos de la música del mundo cuando se unieron a Los Beatles para la transmisión televisiva de su canción «All You Need is Love», en los coros.
Un momento sublime que terminó con el mito de la rivalidad entre ambas bandas inglesas.
Keith fue Richard durante un tiempo
Al principio de la carrera de Los Rolling Stones, Richards fue persuadido por el manager de la banda en ese momento de quitarse la «s» de su nombre para hacerlo «más pop».
Al final el músico decidió que eso no era para él, por lo que ya en los 70 recibió la consonante al final de su apellido.
Richards y Jagger se asociaron gracias a Muddy Waters
Richards y Jagger se conocieron en la escuela primaria.
Incluso fueron vecinos hasta 1954, pero su amor mutuo por el rock & roll lo descubrirían más tarde.
Fue un día cuando Jagger se encontró casualmente con Richards en un tren mientras este llevaba álbumes de artistas del R&B, de sus héroes, Muddy Waters y Chuck Berry.
No por nada sería una canción de Muddy Waters la que inspiró el nombre de Los Rolling Stones.
Keith Richards tuvo un abuelo genial
El abuelo materno de Richards, Augustus T. Dupree, había viajado por Gran Bretaña con su propio grupo de big band jazz, conocido como Gus Dupree and his Boys.
De hecho, fue Dupree quien alimentó por primera vez los sueños de su nieto de convertirse en músico.
Cuando Richards era un niño, su abuelo tenía una guitarra en un estante que Richards no podía alcanzar.
El abuelo prometió al entonces pequeño nieto que que le dejaría tocar la guitarra cuando pudiera sacarla del estante.
Tras haber ganado Richards algunos centímetros de altura, su abuelo cumplió la promesa y le enseñó a Richards a tocar nada menos que «La Malaguena», un tema de 1947 atribuido a los músicos mexicanos Elpidio Ramírez y Pedro Galindo Galarza.
La recompensa de Richards fue quedarse con la guitarra.
Años después el guitarrista reflexionaría acerca del hecho como un momento en el que había recibido «el premio del siglo».
Esto y mucho, mucho más es Keith Richards, una leyenda viviente del rock.